Lucas, Teofilo soy yo
2 tal como nos las han transmitido los que desde el principio fueron testigos oculares y servidores de la Palabra,
Este segundo versículo ya no es tan claro. Si en el primero nos dice que todo está verificado, en el segundo nos dice que toda verificación fue transmitida por los testigos que, a todas luces, brillan por su ausencia.
Tal vez más adelante se verifiquen las cosas que se nos quieren transmitir, por ahora descubrimos que Lucas no conoció a Jesús. Esto es lamentable. Lucas se elimina de ese conjunto de personas que fue testigo de Jesús. Él lo conoció por medio de otros. Fue la pasión de otros lo que lleva a Lucas a escribir. Debemos estar atentos ahora para saber quien lo contagió a él. ¿Qué historias escuchó, que lo hizo un seguidor de Jesús?
3 he decidido yo también, después de haber investigado diligentemente todo desde los orígenes, escribírtelo por su orden, ilustre Teófilo,
Aquí Lucas se deja llevar por su sentido personal. Como ya dijimos antes, es muy difícil para un escritor ser objetivo y aquí Lucas no es la excepción. Esto es peligroso y mucho más si se está a punto de escribir sobre un hecho de esta magnitud. Pero notemos algo interesante de este versículo. El autor es educado. De hecho sabe leer y escribir, eso por si sólo lo coloca en un nivel alto de educación para la época. Además le da autoridad a la investigación. O al menos eso dice. Ya de por sí, es importante que se sepa que hay que investigar algo antes de escribirlo, opción que nosotros hemos optado por abandonar. Recordemos que no sabemos nada, y sólo lo que dice el escritor nos llevará a conocerlo a él, y a la persona de la que Él escribe.
Además nos informa que es ordenado. Nos dice que lo va a escribir en orden. Así que tenemos una persona que sabe de historia y cómo preservarla.