Lucas, Teofilo soy yo

German Muñoz

29 Ella se conturbó por estas palabras y se preguntaba qué significaría aquel saludo.

Exacto. A mí me pasaría lo mismo. Primero pongo cara de despistado (porque estoy despistado) y luego me pregunto a mí mismo: ¿De qué estamos hablando?

Nótese que hasta aquí María no habla. Mientras esto siga así, ella podrá hablar para contar el cuento. Crucemos los dedos y deseémosle suerte.

30 El ángel le dijo: «No temas, María, porque has hallado gracia delante de Dios;

¡Aja!... Gabriel es más suave con las damas que con los varones. Por un momento me hago a la idea que María podría rebelarse y gritar y poner en duda la veracidad del mensajero. Ya no me sorprendería que Gabriel se siente y le haga gráficos, explicándole todo el asunto de la santísima trinidad y cómo fue que Dios dijo “hágase la Luz” y la luz se hizo. Este es definitivamente otro Gabriel.

Mejor dicho, es el mismo Gabriel que se comporta en forma diferente ante las damas. No me sorprende. Es más, me sorprendería que dejara muda a María ya que tenemos premisas de la forma en que se comporta Gabriel. (No debemos olvidar que Gabriel es un mensajero de Dios). Recordemos que hace unos días el mismo Gabriel trajo el mensaje que una mujer quedaría encinta y no era cualquier mujer, era una mujer anciana. Y no sólo anciana, además era estéril. Así que Debemos aceptar que a Dios le encanta ayudar a las mujeres.

¿Es Dios un feminista?

¡Lo es! Tenemos las pruebas que lo acusan.

Así que podemos continuar con la seguridad que María podrá preguntar la que quiera que su voz seguirá intacta.

A Zacarías no le fue tan bien. A Zacarías nadie le dijo: “No temas.”

¡No!