Lucas, Teofilo soy yo

German Muñoz

Qué tal que todo sea una confusión. Eso podría explicar todo y encontraremos que nadie miente. Va a resultar cierto que Dios (El padre) cumple sus promesas y que sus hijos (nosotros) recibimos las bendiciones.

¿Cómo puede ser eso?

Volvamos a leer lo que nos dice Zacarías.

… que nos salvaría de nuestros enemigos y de la mano de todos los que nos odian.

¿Quién era el Mesías?

El salvador que vendría a acabar con reyes y elevar humildes.

¿Cómo sabemos eso?

Porque los profetas dijeron que Dios mandaría a alguien que nos defendería de nuestros enemigos y los que nos odian.

Esperen… ¿Dios dijo eso?

¿Cuándo dijo Dios que destronaría imperios?

No hay registro de eso, Si Dios dijo que nos salvaría de nuestros enemigos, no necesariamente quiere decir que Dios está diciendo que nos esperemos un momento, que Él está inventando unos misiles que le explotan la casa al más armado. Eso lo creamos nosotros. La traducción es errónea.

¿No podría ser que la forma en que nuestro Dios actúa sea la misma con que actuamos los padres?

¿Cómo defendemos los padres a los hijos?

Educándolos para que se defiendan ellos mismos. Esa es la manera más efectiva de asegurarnos que están bien. A ningún padre se le ocurre (hay excepciones) ir a la casa de su hijo y defenderlo cuando alguien lo ataca.

¿Qué tal que la que lo ataca sea su propia esposa?, ¿Se van a meter los suegros en cada pelea conyugal que sus hijos tengan?

¿A dónde pararía todo si yo me meto a solucionar todos los problemas de mis hijas?

Pero, ¿Qué tal si las educo?