Lucas, Teofilo soy yo

German Muñoz

6 Y, haciéndolo así, pescaron gran cantidad de peces, de modo que las redes amenazaban romperse.

OK. Un milagro más. Y hasta ahora estamos empezando.

7 Hicieron señas a los compañeros de la otra barca para que vinieran en su ayuda. Vinieron, pues, y llenaron tanto las dos barcas que casi se hundían.

Como para callarle la boca a cualquiera.

8 Al verlo, Simón Pedro cayó a las rodillas de Jesús, diciendo: «Aléjate de mí, Señor, que soy un hombre pecador.»

¿Simón Pedro?

¿Le cambiaron el nombre o así se llamaba?

Pero entonces ahora descubrimos que este Simón es el famoso Pedro, aquel en el que está edificada la iglesia.

El nombre Pedro se pronuncia Pietro en italiano, lo cual nos sirve para parecer intelectuales en una reunión en donde podemos sacar este tipo de información que no sirve para nada, pero impresiona. O eso quisiera creer uno.

Pietro.

¿Y sabías que Pietra significa piedra?

¿Será que Jesús vio a Simón, le pidió que lo llevara a lanzar las redes y una vez ocurrido el milagro, Jesús le cambia de nombre a este discípulo y ahora lo llama “Pietro” o mejor dicho: piedra?

Puede ser que Simón es tan terco que ahora Jesús lo compara con una piedra. Ya veremos más adelante para tratar de despejar este apodo bíblico.

9 Pues el asombro se había apoderado de él y de cuantos con él estaban, a causa de los peces que habían pescado.

Hay que darle la razón a Simón Pedro. Cualquiera se asusta ante tales milagros.