Lucas, Teofilo soy yo

German Muñoz

Claro que les voy a pedir que se imaginen la siguiente historia: el leproso llega, le dice a Jesús que lo limpie y Jesús le dice: «Quiero, queda limpio.». Pero nada pasa. Quiero decir, está perdonado de sus pecados pero la lepra sigue en su cuerpo. Debe ser un poco doloroso que Jesús le diga que todos sus pecados le han sido perdonados y lo deje con la "enfermedad"... Eso hubiera sido suficiente para probar si la fé de este hombre era honesta. Y no vayan a creer que me burlo del leproso. Es que estaba pensando en mí. ¿Qué tal si soy perdonado, pero no sucede lo que yo espero que suceda?

Ahí es donde en realidad se demuestra que uno tiene fé o solo esta es aparentando.

13 Él extendió la mano, le tocó y dijo: «Quiero, queda limpio.» Y al instante le desapareció la lepra.

OK. Parece que Jesús no está para juegos esta mañana y decide otorgarle la gracia.

14 Le ordenó que no se lo dijera a nadie. Y añadió: «Vete, preséntate al sacerdote y haz la ofrenda por tu purificación como prescribió Moisés, para que les sirva de testimonio.»

Aquí Jesús nos muestra que sigue las leyes. Es respetuoso de las leyes establecidas.

Aún no entiendo su pedido de no decírselo a nadie.

Será que quiere utilizar una técnica de publicidad en reversa. De hecho todos conocen a este leproso. Lo verán curado y aunque el leproso no diga nada, todos se verán obligados a preguntar.

Al presentársele al sacerdote ya sabemos lo que va a ocurrir. El sacerdote estará en un conflicto. Sólo los profetas hacen milagros. Entonces… ¿Es Jesús un profeta?

Siempre ha sido un peligro hacer milagros si no eres enviado del Señor y aprobado por los sacerdotes. Pero este profeta no debe ser falso, si fuera falso, ¿cómo es que envía los curados a que se presenten con el sacerdote y paguen la ofrenda que dejó establecida Moisés?