Lucas, Teofilo soy yo

Aunque aquí se ve que aún no creen que Jesús sea el que dice. El hecho, que lo pongan al nivel de Juan el Bautista, sólo dice que los apóstoles aún no saben con quién están tratando. Jesús lo sabe, es por eso que hace unos párrafos antes se molestó y les dijo: ¡OH generación incrédula y perversa! ¿Hasta cuándo estaré con vosotros y habré de soportaros? 

Viéndolo bien, esa frase estuvo un poco fuerte. 

¿Qué habrá querido decir con eso? 

Y lo peor es que nos vamos a quedar sin saberlo porque la frase ha sido traducida infinidad de veces haciendo que se pierda todo su contexto. 

Los apóstoles vuelven a poner a Jesús en el mismo nivel que Juan el Bautista. Yo me desesperaría. 

Y el hecho de desesperarme me pone en evidencia, porque pensándolo mejor: ¿Por qué habría de desesperarme? 

Y creo que me molesta porque dejo en claro quién soy yo. 

Y mis acciones, para dejarlo en claro, es señal suficiente para mostrar, que no sé quién soy.

Por eso me desespero. 

2 al 4. Él les dijo: «Cuando oréis, decid: Padre, santificado sea tu Nombre, venga tu Reino, danos cada día nuestro pan cotidiano, y perdónanos nuestros pecados, porque también nosotros perdonamos a todo el que nos debe, y no nos dejes caer en tentación.» 

Se me hizo un poco corta esta oración. Y yo lo sé porque la he estado rezando desde mi niñez. Me he tomado la molestia de ir a revisar otro evangelista y me encontré con Mateo, que tiene la siguiente versión: